1 Corintios 15:57
¡Pero gracias a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo! (1 Corintios 15:57)
Romanos 8:37
Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. (Romanos 8:37)
Hebreos 12:1
Por tanto, también nosotros, que estamos rodeados de una multitud tan grande de testigos, despojémonos del lastre que nos estorba, en especial del pecado que nos asedia, y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante. (Hebreos 12:1)
2 Crónicas 20:15
Y dijo Jahaziel: «Escuchen, habitantes de Judá y de Jerusalén, y escuche también Su Majestad. Así dice el Señor: “No tengan miedo ni se acobarden cuando vean ese gran ejército, porque la batalla no es de ustedes, sino mía. (2 Crónicas 20:15)
Salmos 18:35
Tú me cubres con el escudo de tu salvación, y con tu diestra me sostienes; tu bondad me ha hecho prosperar. (Salmos 18:35)
2 Corintios 2:14
Sin embargo, gracias a Dios que en Cristo siempre nos lleva triunfantes y, por medio de nosotros, esparce por todas partes la fragancia de su conocimiento. (2 Corintios 2:14)
Salmos 60:11-12
Bríndanos tu ayuda contra el enemigo, pues de nada sirve la ayuda humana. Con Dios obtendremos la victoria; ¡él pisoteará a nuestros enemigos! (Salmos 60:11-12)
2 Corintios 2:1
Sin embargo, gracias a Dios que en Cristo siempre nos lleva triunfantes y, por medio de nosotros, esparce por todas partes la fragancia de su conocimiento. (2 Corintios 2:1)
Filipenses 3:14
Sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús. (Filipenses 3:14)
1 Juan 5:4
Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe. (1 Juan 5:4)
2 Timoteo 4:7
He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, me he mantenido en la fe. (2 Timoteo 4:7)
1 Corintios 9:24
¿No saben que en una carrera todos los corredores compiten, pero solo uno obtiene el premio? Corran, pues, de tal modo que lo obtengan. (1 Corintios 9:24)