¡La fe en Dios! Escalando niveles de espiritualidad
Quizás has escuchado la expresión ¡Ten fe! Y te has preguntado ¿Cómo sé que tengo fe? O ¿Qué es la fe? La fe en Dios es un tema muy discutido en la Biblia. Se menciona en el Antiguo y Nuevo Testamento y es abordado en casi todos los libros de la Biblia, donde algunos de sus personajes tuvieron fe e incitaron a otros a tenerla, la fe ha sido definida por muchos como la confianza absoluta de algo, Pero ¿Qué es la fe en Dios?
La palabra “fe” aislada puede tener un sinfín de interpretaciones incluso en el mundo secular, pero ¿qué pasa cuando la unimos y creamos la frase “fe en Dios” ?, nos vamos a otro nivel.
Al hablar de fe en dios tenemos un concepto más profundo de lo que verdaderamente significa, es allí donde entendemos que una palabra tan sencilla puede convertirse en una de las frases más vivientes en nuestras vidas, porque como cristianos sabemos que vivimos con la esperanza en Dios, en sus propósitos, sus milagros, provisión, fortaleza y su venida.
La fe en Dios – Lo que dice la biblia
A lo largo de la historia de la biblia podemos apreciar a muchos personajes que vivieron y actuaron según la fe que tenían en Dios, y aunque la mayor expresión de fe se puede ver en el nuevo testamento con Dios hecho carne (Jesucristo), desde la creación del mundo, la humanidad de manera indirecta o directa ha vivido con la confianza en un ser sobrenatural.
Versículos sobre la fe en el antiguo testamento
Los profetas menores Habacuc y Nahum coincidieron en su definición de fe en Dios, ambos la muestran como aquella confianza y seguridad plena en Dios, cuando declaran:
Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían. (Nahum 1:7)
He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; más el justo por su fe vivirá (Habacuc 2:4)
Habacuc va un poco más allá cuando especifica que él “justo” es quien vivirá por la fe de Dios, y es cuando entendemos que la confianza también puede estar en personas, objetos, situaciones o deidades, pero solo la confianza en Dios es la que nos eleva a un escalón único de espiritualidad de crecimiento y de santidad.
También lo vemos demostrado en tres jóvenes Sadrac, Mesac y Abed-nego (Ananías, Azarías y misael) que fueron librados del horno de fuego justamente por la fe que tenían en Dios cuando exclamaron:
He aquí nuestro Dios, a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará (Daniel 3:17).
Otros que hicieron referencia a la esperanza en Dios fueron el Rey David aquel hombre con el corazón conforme al de Dios, autor del libro más largo y famoso; “Salmos” y su hijo el sabio Salomón autor del libro Proverbios.
Su fe en Jehová fue tan grande, que su gracia los alcanzó convirtiéndose en dos de los Reyes más populares de la Biblia con vidas que han dado mucho que aprender a los cristianos de este tiempo.
En Dios he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre? (Salmos 56:11)
Encomienda a Jehová tu camino, Y confía en él; y él hará. (Salmos 37:5)
Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia (Proverbios 3:5)
Los profetas mayores Isaías y Jeremías demostraron que el corazón del hombre que confía en Dios puede estar seguro y tranquilo con la convicción que él concede vivir una vida plena.
Bendito el varón que confía en Jehová, y cuya confianza es Jehová. (Jeremías 17:7)
Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. (Isaías 26:3)
Versículos sobre la fe en el nuevo testamento
El concepto de fe en el nuevo testamento se hace más tangible cuando es el propio Jesucristo quien enseña acerca del tema. La fe es una de las principales cosas que nos ayudan a mantenernos firmes en nuestra relación con Dios, es la confianza que tenemos en Dios y en su Palabra, es lo que nos mantiene apegados a Él cuando todo lo demás parece estar desmoronándose.
Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. (Romanos 10:17)
Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor. (Gálatas 5:6)
Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. (Marcos 11:24)
Sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que él existe, y que sabe recompensar a quienes lo buscan (hebreos 11:6)
Porque vivimos por la fe, no por la vista (2 Corintios 5:7)
Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve (hebreos 11:1)
Frutos de la fe Dios
La fe en Dios es una de las principales doctrinas del cristianismo, nos da esperanza y nos permite acercarnos a él. Sus mismos discípulos le dijeron al Señor: «Auméntanos la fe» (Lucas 17:5). Y es porque entendieron la grandeza de todas las promesas dadas por Dios a sus hijos.
- La fe en Dios nos permite experimentar su paz y gozo inefables, en medio de situaciones adversas (Santiago 1:2-4).
- La fe nos da esperanza y consuelo en medio del dolor y el sufrimiento (Romanos 5:3-5).
- La fe nos permite amar a los demás y perdonar de la misma forma en que Dios nos perdona (1 Juan 4:7-12).
En resumen, la fe es un don de Dios que nos ayuda a establecer y mantener una relación íntima con Él. Es lo que nos permite experimentar su presencia y poder en nuestras vidas, aunque no podamos verlo con nuestros ojos.
Si buscas tener fe en Dios, él te la dará. Todo lo que necesitas hacer es pedírselo. ¡La fe es un regalo maravilloso de nuestro Padre celestial hacia la humanidad y especialmente a sus hijos!
